24 de junio de 2025

El estudio del kata

La palabra Kata es un vocablo de origen japonés, que podría traducirse en lengua  castellana como: Formas o grupo de ejercicios defensivos y de contraataque que varían en nivel de complejidad y origen de los mismos. Dentro del estilo o la escuela Shito Ryu los kata tienen su origen o base principal de creación en 3 ciudades ubicadas en la isla de Okinawa al sur de Japón y esas ciudades son: Naha, Shuri y Tomari; hago la salvedad que el fundador del estilo el Maestro Kenwa Mabuni, también tuvo la posibilidad de aprender y conocer de técnicas o sistemas de defensa de China, por esas diferentes influencias en el desarrollo y estudio técnico del arte por parte de su creador Kenwa Mabuni, el estilo Shito Ryu es reconocido como de los principales estilos de karate japonés, a su vez es  el que cuenta con más variedad de técnicas y mayor cantidad de kata según la Federación mundial de karate. 


El kata se podría decir que es el segundo escalon en el estudio del arte, ya que podríamos resumir brevemente que el karate tiene 3 escalafones  que son Kihon, Kata y Kumite. El kihon es el conjunto de técnicas básicas que nos dan la base para poder ejecutar los kata que serían el segundo escalón en el estudio del arte y luego el tercero es el Kumite, que normalmente le llamamos combate, sin embargo su traducción más literal es: manos entrelazadas.


El kata es la unión de las técnicas básicas que nos ayudan a desarrollar e internalizar un combate imaginario con uno o más oponentes y que a medida que vamos avanzando en el estudio del arte, los mismos van aumentando en nivel de complejidad y de técnicas que con su práctica continua es lo que almacenamos en nuestro subconsciente, lo que nos hacer reaccionar de forma natural y espontánea ante cualquier eventualidad.


Los kata tienen una característica y es que todos comienzan con defensa con la finalidad que hacernos recordar unos de los preceptos principales del karate y no es otro que: Karate ni sente nashi, lo que se puede traducir como: el karateca nunca ataca, somos personas de paz y aunque suene o parezca contradictorio ya que es un sistema de defensa y ataques o contraataques, se podría asegurar y expresar que a medida que vamos conociendo las técnicas, así como sus usos, comenzamos a ganar seguridad y confianza en nuestras destrezas, lo que nos hace mantenernos alejados de situaciones donde la violencia pueda estar presente y evitamos confrontaciones que sabemos no nos llevarán a nada positivo, no olvidemos que no existe honor en ninguna pelea que podamos evitar.


 Como escribí hace unos años: Los karatecas somos personas de paz, sin embargo cuando estemos  en una situación donde tengamos la percepción de estar en peligro, el karate que reside en nuestro subconsciente saldrá de forma natural y las personas que nos puedan agredir, simplemente se convierten en objetivos a ser anulados o controlados. La mente del karateca bien entrenado a nivel de técnicas y de crecimiento interno, desarrolla entre otras cosas aumento del espectro visual, aumenta la percepción ante situaciones de riesgo, etc. El karateca vive en paz, pero con un sentido de vivencia de la realidad diferente al ciudadano común, realmente yo no concibo una vida sin karate y eso está comprobado en estudios, es decir los cinturones negros en Karate son los únicos seres humanos que hasta el momento han logrado aumentar el tamaño de la masa blanca del cerebro motivado al trabajo diario de la relación entre nuestro cerebro y tanto la motricidad fina, como la motricidad gruesa. 


Como relaté anteriormente el estilo creado por el Maestro Mabuni tiene influencias de 3 ciudades de la isla de Okinawa y de sistemas defensivos de origen chino entre otros, por lo cual cada maestro le imprimió su toque personal a los kata y también influyen los factores geográficos en el desarrollo de las técnicas, lo cual apreciamos en el estudio de los mismos. Es importante destacar que entre los estilos más representativos del karate japonés y de sus fundadores se reconoce al maestro Mabuni como el técnico, es decir que en la práctica el estilo Shito Ryu puede que se aprecie como que es el más complejo de aprender y de materializar, ya que es el que tiene mayor cantidad de fuentes de información y origen de las técnicas, vale la pena mencionar que el título de “Mabuni el técnico “ fue usado en varias oportunidades por el maestro Gichin Funakoshi a quien se le conoce como el padre del karate moderno fundador del estilo Shotokan, relataba el maestro Funakoshi que cuando alguien quería indagar más sobre una técnica o la razón de hacerlo de una forma específica, el siempre respondía: si quieres saber de técnicas y profundizar sobre todos los aspectos deben hablar con el maestro Mabuni que es el técnico.


Al tener los kata diferentes raíces y los toques personales de cada maestro, es muy valioso tomar en cuenta cada detalle por más pequeño que sea y a su vez las técnicas también debemos ajustarlas a ese toque personal que lleva impresa cada una según su origen.


El maestro Mabuni fue un estudioso de todos los kata y de las técnicas que los conforman, así como también de las aplicaciones de las mismas. El fue el pionero en la adaptación del karate para su masificación y fue quien decidió incluir a las jóvenes al estudio del mismo, ya que era una práctica exclusiva para hombres y jovenes. A su vez también se le reconoce por desarrollar ejercicios formales de entrenamiento como por ejemplo: Oyoo bunkai Kumite, también conocido como Hokei Kumite. La creación de ejercicios para ayudar a mejorar las destrezas de técnicas y desplazamientos como lo son Tenshin Happo, Hiji ate gojo y Keri waza entre otros.


La práctica y trabajo del estudio de los kata tiene varios pasos que se deben cumplir para así obtener una buena ejecución de los mismos, entre los cuales están: conocimiento del patrón de movimientos, velocidad, respiración, fuerza, técnica, etc. Por lo cual se recomienda comenzar a enseñar los kata comenzando con grupos de movimientos de no más de 4 posiciones o técnicas ya que así se hace más fácil el aprendizaje e ir gradualmente aumentando en la misma proporción hasta que el estudiante logra retener todo el conjunto de movimientos, para comenzar a trabajar a profundidad la ejecución del kata y así obtener un buen desempeño.


Hago la salvedad que un kata básico está compuesto de un promedio no superior a 20 pasos, mientras que los más avanzados pueden contener más de 100 movimientos; al lograr el estudiante manejar o conocer el patrón del kata, debe comenzar a trabajarlo por partes e ir obteniendo el ritmo que cada uno le imprime a su ejecución, a continuación les dare algunas de las rutinas de trabajo que pueden ser utilizadas para el estudio del kata.


Se puede comenzar realizando todo el patrón enfocado exclusivamente en el movimiento de piernas o el trabajo de la base del kata, ya que ahí está contenido gran parte del alcance en la ejecución, después se realizara el patrón con las técnicas de mano, para luego unir las técnicas de base y recorrido de manos lo cual es determinante en el estudio y comprensión del mismo.


Posteriormente se debe agregar la respiración, la fuerza, la velocidad que es lo que dará el ritmo al kata, a su vez se debe agregar también la actitud mental ya que el kata no es simplemente una coreografía de técnicas, el kata es un combate imaginario que nos prepara poco a poco nuestra mente y nuestra condición física al momento de una posible confrontación, por eso hay que vivirlo, sentirlo y hacer cada kata parte de nuestro ser, puede sonar un poco poético pero es la realidad, si no lo vives o no lo haces parte de ti es un grupo de movimientos sin vida.


El conocimiento, así como la aceptación que somos seres espirituales viviendo una experiencia humana también tiene mucho que ver en la práctica de los kata. Trataré de explicarlo en palabras de a centavo: nuestros pensamientos, nuestras emociones y nuestros sentimientos no los podemos atrapar, es decir una alegría de un momento no la puedo guardar en un bolsillo y usarla cuando sienta tristeza o nostalgia por ejemplo, entonces tenemos que reconocer que esa parte interna que tiene vida propia en nuestra parte espiritual, que está conectada a nuestra energía de vida, por eso el manejo de la energía o el uso de la misma en la ejecución de un kata como en todos los aspectos de la vida, determina nuestro existir. El manejo de nuestra energía al momento de efectuar una técnica, ya sea defensiva o de ataque se podría decir de una forma filosófica que vamos contenidos dentro de ella. Vale la pena agregar que nuestro cuerpo tiene lugares que conocemos como puntos vitales o puntos de presión, es ahi donde debemos enfocar nuestra energía para desarrollar las técnicas y hacerlas más eficientes con menos esfuerzo.


Durante la práctica en clase, es nuestro deber, como instructores complementar el entrenamiento con ejercicios que les permitan a a los estudiantes, el desarrollo del uso de la energía, la alineación energética de su cuerpo y ayudarlos a los que desconocen el reconocimiento de la misma.  Dentro del trabajo  que debemos realizar para el conocimiento y manejo de nuestra energía en la ejecución del kata, existe un momento dónde se produce la unión o la fusión de cuerpo, mente y espíritu liberando nuestra energía y es lo que conocemos como: Kiai, que se podría traducir como unión de energías,  el kiai es el sonido que usamos para expresar esa unión de todo nuestro ser en la ejecución del kata con una técnica determinada.


 El sonido de liberar toda esa unión, nace en nuestra área abdominal y nos ayuda a reafirmar nuestra conexión interior en el kata , sin embargo no es recomendable usar el vocablo en sí mismo cuando dejamos salir el sonido, es decir no deberíamos decir: kiai, se debe expresar un sonido propio ya que a su vez el sonido emitido también genera un efecto intimidante en el subconsciente de nuestro oponente y liberador en nosotros.


La práctica del kata no solo se limita al aprendizaje para tener su conocimiento o para ser ejecutado en exámenes, también se ejecuta con ciertas variantes en la rama del karate deportivo, sin embargo a lo largo de los 17 años que tiene la escuela he desarrollado diferentes formas de ejecutar un kata con la finalidad de obtener otros resultados que no son de uso común dentro del entrenamiento y aprendizaje del arte del Shito Ryu. 


La idea de hacer variaciones en la forma de ejecutar un kata, me surgieron a raíz de un alumno que estuvo un tiempo en el dojo hará ya como unos 10 años atrás y se retiró ya que su familia regresó a su país natal, era un joven de aproximadamente unos 12 años de edad que tenía una condición especial dentro del espectro autista.


El joven logró obtener su cinta amarilla en un lapso como de 6 meses después de entrenar con nosotros y al comenzar a enseñarle el kata Heian o Pinan Nidan se le hacía muy complicado alcanzar la continuidad en la ejecución del mismo y una tarde que el llegó a su clase como media hora antes, se me ocurrió realizar el kata desde el final hacia el comienzo, es decir del paso 21 al 20 y así sucesivamente hasta el paso número 1, realmente no se como me surgió esa idea, pero el se motivó a seguirme y esa tarde logró memorizar la ejecución completa, fue una experiencia muy interesante y en cuestión de 3 días ya lo comenzó a realizar desde el principio hasta el final y regresar al punto de partida, otro dato importante es que en las dos modalidades alcanzaba enbusen. 


De ese logro tan interesante, decidí realizar el mismo kata en línea recta, trabajando en giros de 180 grados y comencé a compartir esas tres formas de ejecución con algunos alumnos y por supuesto incluyéndolo a él, fue todo un éxito. Tanto es así que desde esa fecha lo seguimos haciendo y ellos los llaman Heian Nidan versión 2.0 y 3.0. Incluso en el año 2022 cuando el Sandaime Soke Kenyu Mabuni visitó por primera vez el dojo, con humildad y respeto preparé un grupo de 3 alumnos para mostrar las 3 versiones y le dejé saber que lo originó, así como esperaba su opinión sincera al respecto; luego de ver la ejecución de los alumnos, se sonrió y me dijo que nunca había visto algo así, le pareció interesante el enfoque de mantener la esencia en el kata pero con variantes que no alteran el valor del mismo.


Antes de continuar con las otras formas que practicamos en el dojo con los kata, no puedo dejar pasar lo importante que es el comienzo, así como el final o cierre del kata, desde la posición inicial del saludo y de la forma  colocar las manos según el origen de los mismos, así como los 5 pasos o movimientos que conforman el cierre del kata.


Dentro de las variaciones que usamos en el dojo para la práctica de los kata, voy a enumerar y explicar algunas:


  1. Como meditación en movimiento.
  2. Como ejercicio cardiovascular. 
  3. Con los ojos cerrados.
  4. Realizarlo en un área aproximada de un metro cuadrado.
  5. Realizarlo en dirección de cada punto cardinal. 
  6. Ejecutar en Koshiki algunos de ellos ( Sanchin, kihon o Nainfanchin)
  7. Realizarlo en tensión dinámica.


Como meditación en movimiento: El kata se ejecuta a velocidad lenta en todos sus secuencias de tecnicas , se realiza con respiraciones totalmente diafragmáticas que igualmente son profundas y lentas; las manos no se cierran durante la ejecución buscando liberar energía retenida en el cuerpo, también se realiza con la luz apagada en el área del tatami, procurando armonizar respiración, movimientos, ritmo cardiaco con el lugar del tatami, incluso en algunas oportunidades con sonido bajo de interpretación de Sakuhachi preferiblemente.


Como ejercicio cardiovascular: En esta práctica, el trabajo se realiza con mucha velocidad y respiraciones muy activas, buscando acelerar el ritmo cardiaco para obtener beneficios aeróbicos. 


Con los ojos cerrados: Como es sabido la piel se puede considerar el órgano más grande de nuestro cuerpo, mientras tenemos los ojos abiertos nuestro cerebro está recibiendo, procesando, analizando y archivando mucha información visual, mientras que al cerrar los ojos automáticamente las ondas cerebrales tienden a reducir su velocidad y frecuencia buscando entrar en un estado de relajación, lo que ordena a nuestra piel a convertirse en un radar de espacio, sensaciones y percepciones de todo lo que nos rodea y es ahí donde comenzamos a sincronizar cada movimiento, cada sentir buscando desarrollar el fortalecimiento de nuestra seguridad interior, así como trabajar la conexión más importante que es ver hacia dentro de nosotros mismos, para encontrar respuestas a tantas situaciones, así como del aprendizaje del arte del camino de la mano vacía.


Área de un metro cuadrado: Cada pieza del piso que forma parte de nuestro tatami, tiene aproximadamente un metro cuadrado y muchas veces hago parte de la clase en un cuadrante asignado para cada uno, con el objetivo de enseñarles que no se requiere de grandes áreas cuando no estamos en un dojo para practicar las técnicas e igualmente para acostumbrarse a realizar un combate en espacios reducidos, para lograr adaptarse a cualquier lugar.


Punto cardinal: A comienzos de este siglo 21, tuve el privilegio de recibir al Nidaime Soke Kenei Mabuni en mi casa en la ciudad de Caracas y en una conversación sobre la forma de mejorar los kata, el me hizo énfasis en que debemos practicarlos comenzando en dirección de cada punto cardinal, para aumentar el trabajo de coordinación, así como hacer que nuestro cerebro no se desplace de forma errada, ya que no siempre se tiene la posibilidad de realizarlo en dirección hacia el norte como es lo acostumbrado, muchas personas condicionan su trabajo en una sola dirección y eso una limitante que no genera beneficio alguno para el estudiante. 


Realizarlo en Koshiki: Algunos maestros consideraban que realizar los kata con las manos abiertas sin cerrar los puños en ningún momento, era una forma muy positiva de liberar energía y así fluir eficazmente en cada técnica, ya que alegaban que cerrando el puño se retenía parte de la energía que debemos imprimirle al oponente. Así que básicamente el kata kihon, el kata Sanchin y el kata Nainfanchin los practicamos eventualmente con las manos abiertas, teniendo como referencia que se pueden realizar con nuestras manos en Yonhon Nukite o también en la combinación de Shotei / Koken, hago la salvedad que no deben mezclarse estos dos últimos cuando realizamos la ejecución en la modalidad de Yonhon Nukite.


En tensión dinámica: Basado en el sistema de entrenamiento del Sr Angelo Siciliano,  mejor conocido como Charles Atlas a comienzos del siglo 20, donde el trabajo muscular se desarrolla con el peso de nuestro propio cuerpo y manteniendo los músculos a trabajar en tensión continua o contraídos en su máximo nivel, cada estudiante debe realizar las técnicas contrayendo sus músculos al máximo mientras realiza el movimiento e inmediatamente relajar el músculo utilizado para obtener el fortalecimiento deseado, también se trabaja en parejas donde se ofrece resistencia a las técnicas con una fuerza proporcional a la que aplica el oponente, llevando nuestros músculos a su máximo punto de esfuerzo o de tensión para desarrollar esa zona que deseamos fortalecer, sin olvidar que la respiración juega un papel importante en cada movimiento.


Podríamos decir que el estudio del kata abarca un amplio margen de opciones para su aprendizaje y práctica. A su vez es muy importante el estudio de la aplicación de las técnicas, comúnmente llamado kata no bunkai. Sin olvidar que el vocablo en una traducción literal es: desarmando el kata o lo que es lo mismo que tomaremos el kata  por partes y buscaremos el sentido por la aplicación de cada técnica con fin de lograr hacer de cada técnica o movimiento parte de nuestro subconsciente y así alcanzaremos ser uno con el arte, lo cual nos permitirá trasmitir el legado de generación en generación y ayudándonos en mantener el compromiso de ser mejores instructores cada día. No podemos olvidar que llevamos sobre nuestros hombros un abanico muy grande de responsabilidad y con el compromiso de velar por la transmisión más pura posible del Budo  que desarrollaron nuestro ancestros en esta forma de vida que llamamos: Karate Do. 


Indudablemente que cada practicante puede encontrar diferentes formas del estudio o la práctica del kata, yo solo hago referencia en este escrito a las principales formas que intentó trasmitir los conocimientos que he adquirido a lo largo de mi camino en el mundo del karate que data desde el año 1977 y agradezco de corazón a la Organización UNKS de Venezuela por permitirme publicar este escrito ya que el mismo lo escribí exclusivamente como parte de mi evaluación de grado. 


Fue en el año 1977 cuando tuve mi primera interacción con el Sensei Francisco Arteaga, fundador de la organización UNKS de Venezuela. Aunque después por diferentes circunstancias la vida nos llevó por caminos distintos, no puedo dejar de agradecer el haber tenido el privilegio de recibir cada tarde que iba al Dojo sus enseñanzas y sobre todo algo que lo distinguía de todos los instructores y era su énfasis y dedicación para que aprendiera bien la técnica. El Sensei Arteaga es una voz y una imagen que atesoro desde niño, solo basta con cerrar los ojos verlo ajustarse sus bigotes y decirme: Esto es un mae geri o así se hace un buen mae geri, es esa voz que llevas por dentro que te recuerda la pureza con que se debe realizar una buena técnica. El Sensei Kiko es de esos maestros que aunque no tengas contacto cercano siempre es un referente permanente y de esas personas que sin verla por años te llegan esos pensamientos: Como estará el Sensei y agradeces a Dios por haberlo puesto en tu camino desde el corazón y cierras el pensamiento con la frase: que Dios le bendiga. 


Hace ya más de un cuarto de siglo que debí exiliarme de mi país de origen por razones de seguridad personal de mis hijos. Sin embargo no dudo en afirmar que lo más cercano al estudio y aprendizaje del estilo Shito Ryu en Venezuela se encuentra exclusivamente en la organización UNKS fundada en el año 1992 bajo la dirección del Maestro Arteaga. Quien vivió y trabajó durante 3 años en casa del Maestro Manzo Iwata en Japón. El Maestro Manzo Iwata se considera el alumno más cercano del Maestro Kenwa Mabuni por lo cual tener la posibilidad de vivir, trabajar y entrenar un promedio de 3 horas diarias después de trabajar cada día, le brindó al Sensei Arteaga un privilegio que pocos han tenido en el mundo del karate, por eso la calidad técnica y el conocimiento del arte, así como de de la historia y evolución que compartió el maestro Iwata con el Sensei Arteaga, se puede decir que es invaluable. Sin duda que el Sensei Arteaga es uno de los elegidos de nuestro creador, por su humildad y nobleza para llevar esa gran responsabilidad que la brindó el Maestro Iwata. 


Nanigotomo Uchiwasuretari

Hisasurani Bunoshima Sashite

Koguga Tanoshiki


Olvidando los problemas cotidianos, en la pequeña barca que me lleva a la isla del budo, me entretengo remando.

Kenwa Mabuni 


Oswaldo J Portillo

Miami, FL 

Jun 24 2025. 

5 comentarios:

  1. Excelente Sensei. Muy bien explicado y detallado.

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  2. Muy buena explicación, gracias por su gran aporte para el karate.

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    1. Excelente trabajo, gracias por este escrito o tesis, donde la explicación y descripción hablan por sí solas.

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  3. El alcance del conocimiento va proporcional al
    Interes que le pongamos. Seamos justos en eso.

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  4. Admiro tu sabiduría y la pasión con la que compartes tus conocimientos, tu disciplina y valores.

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