5 de octubre de 2023

En días pasados …

Grabe un breve vídeo en relación a una conversación que sostuve con uno de mis alumnos, un joven de escasos 20 años, que todos los días antes de marcharse del dojo, tiene una o varias preguntas y yo en término de relajar como dicen en mi querida Quisqueya siempre le respondo: cada pregunta son 20 pesos.


Las preguntas de el, siempre se convierten en charlas muy agradables que nos conducen a un aprendizaje sabroso en el intercambio de ideas.


En esa conversación surgió algo que es lo que hoy quiero compartir con ustedes hoy y es relacionado con la espiritualidad en las relaciones. Por razones que desconozco la humanidad dentro de lo que llamamos aprendizaje escolar, deja muy de lado en la mayoría de las culturas la parte espiritual que todos tenemos, de la cual somos parte sin duda alguna y quizás sea la menos cultivada durante los años de escolaridad; no debemos confundir espiritualidad con religiosidad o creencias. Pueda que ambas tengan puntos de conexión, sin embargo las divide una línea muy delgada.


Y por el simple hecho de no cultivar, de no estudiar, de no profundizar o de no comprender nuestra parte espiritual, es que logramos fracasar exitosamente en muchas de nuestras relaciones afectivas, laborales, comerciales, etc. 


Por ejemplo yo soy nacido en Venezuela y mis origenes genéticos son mezclados o mestizos, es decir tengo sangre de origen Vasco - Español y un porcentaje de etnias venezolanas, traigo esto a colación ya que desde pequeño siempre uno escucha: cuado tengas una pareja debes mejorar la Raza, si les puede sonar divertido pero es así.


La gran mayoría de nosotros a nivel de pareja la parte física y emocional juega un papel importante en la escogencia o creencia al momento de fijarnos en alguien y posteriormente idealizarlo en nuestra mente. Rara vez escuchamos en años mozos decir a alguien: su parte espiritual me atrae e incluso de adultos también, sin contar aquellos que solo buscan una solución habitacional o económica al decidor establecer una relación.


Por eso quiero invitarlos a conocer nuestra especial espiritual. Si, es determinante conocernos nosotros antes de poder establecer una relación con alguien y es ahí donde la espiritualidad juega un papel muy importante en lo fructífera o frustrante de dicha relación ya sea familiar de pareja, de amistad o laboral.


Cuando los involucrados en una relación no se encuentran en el mismo nivel espiritual, es donde las diferencias se acentúan más y alguna de las partes comienza a encontrar defectos por doquier o a transferir responsabilidades del fracaso a la otra parte, sin tomarse el tiempo de pensar en la espiritualidad de cada uno. Es menester de aquel que se encuentre más avanzado a nivel espiritual el guiar o ayudar al otro a su despertar o a su evolución espiritual, todo dentro de un marco de armonia y respeto.


De no lograr entre las partes un camino hacia la iluminación de cada uno, las energías universales y nuestro creador se encargarán de llevarnos en caminos distintos de aprendizaje, donde pueda que en un futuro nos reencontraremos o aprendamos que ya es un ciclo culminado en pro de cada uno.


No es tema de ser religiosamente correcto o de buscar cualquier tendencia de moda para poder expresar: soy muy espiritual. Por ejemplo la mayoría de las personas que se decantan como fanáticos de la ciencia, tienden a ser menos espirituales por los dogmas o las filosofías que profesan. Mientras que los que son más afectos a las artes desarrollan mucho más su despertar espiritual, la sensibilidad la levan a flor de piel y contemplan lo sublime de un atardecer tan sentido como un hermoso abrazo de alma.


Gracias Sebas por tus preguntas diarias, por tu amistad y tu interés en tantos temas, que nos motivan a estar con el corazón despierto y la mente alerta en este camino que vamos caminando en el mundo del Karaté, la amistad y la familia.


God bless you all 


Opsensei


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7 de agosto de 2023

El final de los tiempos


Son varias las oportunidades en que las personas llegan a mi buscando respuestas a inquietudes acerca de la cotidianeidad, del existir, de la fe o del propósito de vida.


Es una responsabilidad y a la vez un privilegio el que nuestro creador permita que acudan a mi en busca de respuestas, de palabras de aliento o como me dicen muchas veces: Es usted un ser que da paz, usted da seguridad y claro no puedo ocultar, ni quiero esconder que cada día de mi vida, siempre le solicito a Dios humildemente solo dos cosas que son las siguientes: el que me haga un instrumento de su santa voluntad y que me de la capacidad de comprender sus decisiones. Ya que el conoce plenamente mis necesidades o defectos, así como las virtudes y la razón de estar en este plano, por lo cual sabe muy bien que debo recibir y que no es para mi. Incluso desde pequeño, como muchos lo saben, miro al cielo y le pregunto: Que hago aquí, para que me mandaste, ya que muchas veces me cuesta comprender a la humanidad y siento que la espiritualidad que me ha acompañado desde un poco antes de tener eso que llaman: Uso de razón es incomprensible para quienes me rodean o para muchas almas que se me han cruzado o se me cruzan en el camino. 


Sin embargo yo no dudo que es tarea de todos servir sin emitir juicios, críticas o cualquier otra energía de baja frecuencia a todas las almas que  interactúan con nosotros en esta viaje que es la vida. La vida lo más frágil y vulnerable que tenemos.


Si, les podrá parecer muy osado el que escriba que la vida es frágil y si no lo has pensado así es. En un segundo nos cambia, para bien, para aprender, para reír o para que nos duela e igualmente en un segundo dejamos de estar en ella. Por eso tanto que hablan o predican: El Final de Los Tiempos y se nos olvida que el final de nuestro tiempo nos llega después de cualquier amanecer. No somos dueños del tiempo y prácticamente somos dueños de nada, simplemente llegamos con una misión desconocida del aprendizaje que para nuestra evolución espiritual nos hace venir a este plano y nos volvemos a casa Exclusivamente con lo experimentado a nivel espiritual.


Entonces nuestra vida es lo que decidamos a cada segundo ya sea para dejar un legado hermoso o de no ser así, nos toca regresar a este plano a reparar, a resarcir, a encontrar un perdón u otorgarlo ya que la soberbia de la mente humana que desplaza lo espiritual nos puede llevar a ser unos seres insensatos y faltos de amor por el prójimo entre otras conductas que denotan las mezquindades humanas que son totalmente ajenas a nuestra esencia. 


Si, el amor por el prójimo es la tarea que nos dejó el Maestro Jesús y que si analizamos bien es posiblemente la principal asignatura que debemos aprobar todos al partir, de nada valen los bienes, los títulos, los premios y tantas de las cosas que nos han hecho creer que es la vida. Estamos a tiempo de expresar esos Te quiero o esas disculpas que harán tanto bien a nuestra alma y corazón, así como sacar de nuestro ser y hacer brillar la empatía por el prójimo y hablarles u observarles con los ojos del corazón que nos llevará a existir con un  buen nivel de conciencia y paz.


Opsensei

Agosto 07 / 23