No puedo negar que me encanta el olor a tierra mojada, al igual que a hierba recién cortada, son aromas que despiertan sentidos; brindan sensaciones de renacer, de calma, de conexión con nuestra esencia, de reconocer la noble de la madre naturaleza y de toda la sabiduría que ella encierra y que está allí para todos nosotros. Dispuesta a regalarnos lo mejor de ella y a compartir sin medida.
Debe ser por eso que a las personas les gusta expresar: Poner los pies en la tierra, cuando quieren sentir sensación de seguridad o quizás para definir una postura ante la vida, ya sea a título personal o de terceros.
Es probable que el expresarlo les brinde internamente ese sosiego que desean en un momento determinado; sin embargo lo único seguro que tenemos durante este instante entre dos eternidades que llamamos vida es nuestro regreso a la fuente de donde todos venimos y por la cual vivimos, para quienes lo han olvidado es la más alta vibración de energía que existe y lo llamamos amor en unión con nuestro creador.
Entreguémonos a vivir en amor incondicional y sin dañar a nada o a nadie, hagamos todo lo que podríamos mostrar a Dios, para así llenar nuestra vida de bendiciones con cada respiración y con aroma a tierra mojada.
Opsensei
Bodegas González Byass
Jerez de la Frontera
No hay comentarios:
Publicar un comentario