27 de marzo de 2019

Sentido de la vida ...

Pueden ser muchas las veces donde nos detenemos por momentos y tratamos de comprender el sentido de la vida, quizás no sea una interrogante de todos los días, pero de vez en cuando te llega a tu mente o te la hacen llegar los eventos del día, las reacciones de las personas, las palabras o los silencios que ensordecen el alma.

Hoy en día observo un poco el tiempo transcurrido de vida y se que sin yo quererlo o sin yo planificarlo, la mayoría de las personas me ven como un bicho raro o como un extraterrestre como me dicen con frecuencia; sin embargo mi corazón está en calma, se que descubrir la verdadera misión de vida, la cual no es otra que brindar tus dones al mundo sin esperar nada a cambio, sembrar amor incondicional, servir al prójimo desde el alma, no es nada sencillo ante la vista o los pensamientos de quienes no están en conexión con su misión o su propósito de vida; sin embargo quienes estamos en este camino sin duda estamos plantando las semillas en el lugar correcto para nuestra evolución espiritual y cosecharemos lo necesario a la hora de partir de este plano.

Desde pequeño me era difícil convivir con la hipocresía social o lo que muchos denominan hoy en día: Políticamente correcto.  Cuando niño me llevaron a psicólogos, me realizaron electroencefalogramas y no encontraban nada fuera del rango normal, simplemente fui un niño con puntos de vista diferentes o con reacciones atípicas; lo que me llevo a vivir una infancia o una juventud entre las artes marciales como camino de crecimiento interno, a ser solidario y a su vez solitario con  una continua forma de pensar o de actuar en pro del servicio al prójimo como camino de razón de vida. Dentro de mis ratos a solas descubrí el encanto por la radio y por las letras de las canciones de cualquier género, incluso me atraían más las letras que los ritmos Y encontré en las letras de las canciones mucho sentido a las respuestas de la vida, al comprender y sentir lo que plasmaban sus autores, a tanta cotidianidad que llegue a tener más de seiscientos discos de acetato y saberme cada una de las letras de las canciones. No concibo una vida sin la espiritualidad del karate y sin la música para expresar sentimientos o el sentir cada latido de vida.

Yo soy de los que prácticamente no ve televisión, no dedico tiempo de vida a involucrarse en eventos que percibo como distracción para las masas, tampoco soy de invertir tiempo en socializar con temas o actividades que no tengan efectos positivos en nuestra evolución espiritual o en pro del bienestar común. A veces siento que debo pedir disculpas o quizás quedarme callado por mi ignorancia sobre temas que no ocupan lugar en mi mente como saber de celebridades artísticas, deportivas, modas, tendencias sociales, gente de la realeza u otros temas que no me alimenten mi ser espiritual.

Se que este tipo de acciones o pensamientos no son bien vistos socialmente, pero debo confesar que eso no me inquieta mucho ya que no hago daño a ninguno por no saber de temas superficiales y hago esta salvedad sin querer herir sensibilidades o por querer hacer sentir a alguno que falto el respeto por ello. 

Esto no me hace mejor que ninguno de ustedes, esto no me evita los aprendizajes diarios que me quedan por vivir, pero que sabroso es poder poner la cabeza en la almohada con la conciencia tranquila y con el corazón agradecido por servir a cada alma que Dios me pone en mi camino. Se que aunque les entregue el corazón, existen algunos que no se sentirán satisfechos en su totalidad,  ya que a veces el ego de quien recibe es más grande que el amor de quien entrega.

Así que si alguien se te cruza en tu camino y no está de acuerdo con las injusticias, tampoco con la hipocresía, mucho menos con la falta de sensibilidad por el prójimo o con la falta de caridad e igualmente no comparte con la sed de poder de algunos, así como no acepta que lo material está antes que lo espiritual y con temas tan actuales como la descalificación o la opresión de la mujer en todas sus etapas de vida o contra el maltrato infantil y así con un conjunto de manifestaciones de las miserias humanas tan ajenas a nuestra esencia verdadera, hazle saber que no está solo y que por aquí está otro con similares ideales de ayudar a hacer brillar La Luz y la deidad en cada uno. 

Un fuerte abrazo.
God bless you all.

Opsensei 
Marzo 27 2019






15 de marzo de 2019

Samurai de papel ...




Somos muchos los que a lo largo de la vida muchas veces por no leer, por no indagar  o por no involucrarnos en tiempo real con todo lo que hacemos, sentimos, expresamos o pensamos, nos dejarnos llevar por una opinión generalizada o aceptamos sin cuestionar internamente historias, opiniones, comentarios, leyendas o frases y sin querer nos hacemos cómplices de mentiras que de tanto pregonar aceptamos como verdades.

Hoy compartiré con ustedes algo que muchas veces nos han hecho creer y no es otra cosa  que los samurais eran principalmente unos guerreros sanguinarios e insensibles. Aunque no se puede negar que lograron desarrollar excelentes técnicas de defensa; su principal rol dentro de la estructura social de su época, era servir. Si, servir, los samurais cumplían tareas de servicio dentro de su comunidad que abarcaban diferentes aspectos de la vida y una de ellas era la defensa de su territorio e indudablemente la de su líder.

Sin embargo la entrega y el compromiso por servir, fue de un nivel tan alto que muchos llegaron a dar su vida por el honor y el sacrificio en pro del bienestar de la comunidad; niveles de compromiso que en nuestra sociedad actual no existen prácticamente y al parecer en un futuro no muy lejano, tristemente parecerán como cuentos de hadas. No olvidemos que dentro de esta continua búsqueda del ser humano en varios aspectos del existir, las parábolas, reflexiones o filosofías de vida aportadas a la humanidad por los Samurais siguen vigentes a pesar de los años y de los cambios sociales. La mayoría de estas reflexiones surgieron en conexión con su crecimiento interior gracias al camino o a lo que conocemos como El Budo, vocablo usado por muchos y practicado como forma de vida por minorías en diferentes puntos del globo.

Cuando llame a  este escrito: Samurai de Papel, la motivación principal fue  que son muchas las personas que se nos cruzan en esta vorágine de vida que lleva gran parte de la humanidad, tratando de guiar, de aconsejar, de dirigir o querer ser reconocidos como Gurús de vida y se amparan o se refugian  en todas esas  etiquetas que socialmente vienen estableciendo los  medios masivos de comunicación y en las muy controversiales redes sociales. Hago la salvedad que las redes son de mucha utilidad; siempre y cuando sean usadas en forma constructiva, positiva y con buen criterio. 

Esta masificación de la información está creando una distorsión de la vida en nuestros jóvenes y adultos. No se sorprendan si se cruzan con: Influencers, media expert y un montón de modismos anglosajones que nos quieren vender como forma de vida. Estos cambios sociales están haciendo creer en estilos o patrones de vida que en la realidad son una falsedad en la mayoría de los casos.

Solo intentan cubrir unos vacíos inmensos de espiritualidad, solidez moral y así vez muchos esconden carencias afectivas e incluso condiciones psicológicas que poseen quienes pretenden guiarnos o ser modelos de vida. Sin embargo no solamente es un fenómeno del mundo cibernético, ocurre en muchos ámbitos del laborales, deportivos o profesionales. Incluso en nuestro mundo de las artes marciales también está presente tristemente este tipo de comportamiento, cuántos casos no conocemos de “Maestros” con grados o programas de instrucción basados en desconocimiento o mentiras en todo lo relativo a conocimientos sobre el arte, así como aquellos que forman organizaciones donde ellos son Dioses inaccesibles a sus seguidores y solo están disponibles para los serviles que abandonan su identidad con tal de recibir un título o un lugar dentro de una estructura organizativas; hermanos no olviden que Maestro no es quien tiene más alumnos o seguidores, un verdadero Maestro es quien forma más Maestros y a su vez nos guía hacia nuestro camino de iluminación o crecimiento espiritual.

Por eso debemos buscar respuestas en nosotros y en nuestra esencia, debemos escuchar para comprender y no simplemente para responder, debemos expresar nuestras emociones o nuestras realidades de estados de ánimo como lo sentimos, no con símbolos de comunicación electrónica que no reflejan nuestro verdadero sentir.

Seamos unos Samurais de nuestro momento presente, hemos venido todos a servir en unión a una misión de vida. Somos todos parte de un universo con diferentes formas de vida, que debemos respetar y trabajar cada día en pro de un bienestar universal. Somos seres espirituales con una vibración energética que tiene fluctuaciones y sin esas fluctuaciones o aprendizajes los que nos hará evolucionar, despertemos todos al amor incondicional que está en nosotros y es nuestra verdadera esencia.

Todos cuando llegamos a este plano, nacemos libres de impurezas o mezquindades que se aprenden a lo largo del camino, despojemos a nuestro espíritu de todo lo que no le pertenece antes de regresar a casa y solo así estaremos en el camino de la armonía con el amor universal.

No dejemos que lo externo cambie nuestro mundo interno y continuemos impactando vidas, así como a nosotros mismos de forma errada e insatisfactoria. No seamos samurais de papel, ya que al dejar perder tu esencia y tu luz, solo serás un alma vulnerable manipulada por otros.

Eres tu propio líder en unión con nuestro creador.

Osu 
Opsensei

Marzo 15 2019

9 de marzo de 2019

Venezuela una vez más te escribo ...



Son muchas las horas del día que mi mente navega sobre las aguas de la diáspora venezolana y a su vez sobre todos aquellos que están en esos 916.050 kms2 que me vieron nacer.

Muchos creen que es cómodo, fácil o que poco nos afecta a los que no estamos en ella y la vemos desgarrarse día tras día hacia las tinieblas; pues les diré que nada más ajeno de la realidad. Venezuela no sale, ni saldrá de nuestro corazón.

Hoy te escribo una vez más desde mi esencia y con la finalidad de:
Despertar nuestra conciencia y abrir el alma al verdadero cambio, que nos guiará a la libertad.

Ese cambio debe ser interno de sentido espiritual y con el bienestar común como consigna de vida y no me refiero al bienestar económico que ha limitado nuestra evolución como sociedad por décadas, teniendo el mejor país del mundo.

Puede sonar pedante, pero como Venezuela no hay dos!

Sin embargo la falta de amor por el prójimo, la falta de educación entre otros factores han permitido que vivamos un proceso de autodestrucción que pareciera no tener marcha atrás.

Por eso la libertad se logrará desde un plano espiritual que impactará hacia el exterior de cada uno, dentro y fuera del país. Si, está lucha no es solo por tendencias políticas o por el control de nuestra ubicación geográfica, riquezas materiales, etc. Está es una guerra por la violencia, la hostilidad, la falta de sensibilidad, la falta de valores, la falta de amor por el prójimo y por el bienestar común.

No tiene nada que ver con creencias religiosas. Tiene que ver con la ausencia de amor por los nuestros y por la tierra que nos vio nacer o les ha dado cobijo a quienes decidieron vivir en ella. El cambio espiritual es lo que nos hará libre y nos sacará de la ignorancia, dejen de maldecir, dejen de aceptar la mediocridad, la vulgaridad, lo soez como parte de nuestra idiosincrasia. Vamos a convertirnos en nuestros propios líderes, comenzando por nuestro hogar.

Dejemos de lado las trivialidades, los temas vacíos y enfoquemos nuestras energías a enfrentar las realidades que nos aquejan a diario.  Basta de esperar por Mesias que vengan a resolver lo que nosotros debemos hacer como seres espirituales con dones y como co creadores de nuestras realidades.

Cuando tomemos la determinación de ser libres de corazón, de conciencia, así como sembradores de amor incondicional por nuestros semejantes, entonces surgirá el cambio; dejemos de entregar nuestro derecho inalienable que es la vida en manos de terceros. Hoy le preguntaba a Dios, si a esa deidad que todos llevamos dentro, aunque muchos renieguen o discutan por su existencia: Que puedo hacer por mi país, es un dolor muy fuerte que llevo conmigo cada día y eso no me hacer ser mejor que ninguno de ustedes, pero saben que mis panas: Me duele Venezuela, me duele mi gente, mis amigos de infancia, mi familia y todos lo que ven perder a sus familiares, quedando con el vacío de la ausencia y la impotencia de no poder hacer nada por los nuestros.

Quizás a muchos mis palabras les parezcan sin sentido o de poco valor, así como otros puedan tomarlas en cuenta. Hermanos nuestra lucha es Espiritual antes que política. Muchos recibimos cadenas de oraciones por las redes, por mensajes, etc. Se podrá orar mucho, sin embargo mientras no exista un cambio real en nuestros corazones y en nuestras acciones o pensamientos, las oraciones, mantras, peticiones, etc No lograrán su cometido.

Respeto a todas las religiones o creencias, yo pienso y siento que la religión universal es el amor incondicional por nuestros semejantes. Disculpen a quienes pueda molestar o hacer sentir incomodos si uso en mis escritos la palabra Dios o Creador. He tenido muchas experiencias místicas, por eso afirmo con toda tranquilidad y convicción que existe un ser supremo. Para aquellos que no lo creen, no intento convencerlos, una simple recomendación para mis amigos ateos, no vale la pena discutir por “algo que no existe”

Un fuerte abrazo y muchas bendiciones.